CONOCIENDO A LOS CULLEN

JACOB PVO
Al terminar la conversaciòn con la sanguijuela, me sentìa vacio.
Habìa salido al pasillo para no despertar a Bella, al haber sacado de su bolso el telèfono.
No sentìa las piernas y me derrumbè al suelo.
No supè cuanto tiempo habìa pasado en estado catatònico.
Sòlo fui consiente de que su inconfundible hedor impregnaba el lugar.
-Jacob...gracias-Su voz frìa se escuchaba.
No querìa ni mirarlo, no querìa que viera cuanto dolor habìa en mì.
-No me des las gracias...no lo hicè por ti, y aùn no me doy por vencido, sòlo espero el mìnimo error de tu parte para tomar el lugar que me corresponde..A su lado-Dije tajante.
Me levantè para estar a su altura.
Debìa admitir que en la lucha, me daria batalla.
Medìa por lo menos 1.85, aunque con mis 2.10 le sacaba ventaja.
-De todos modos, te agradezco...¿puedo entrar?-Dijo al ver que me interponìa en la puerta.
Abrì, para dejarnos pasar.
Una cosa era que permitiera que estuviera aqui con ella..y otra muy diferente era que le dejarà a solas con ella.
NO SOY TAN GENEROSO!!!
De inmediato èl se acercò al lado de Bella.
Tocò con sumo cuidado su mejilla.
Me sentìa asqueado por estar ahì, como un maldito miròn entrometido.
Bella al sentir su gèlida y repulsiva piel, se despertò.
-Oh Edward ...¿què haces aqui?-Dijo asustada.
-Jacob me llamò..
¿por que diablos me inmiscuìa a mi? Claro!!..para ser èl el bueno en esta maldita parodia!!
-Perdoname Bella por favor!!-Dijo suplicando.
La reacciòn de màrtir no se hizo esperar por parte de ella.
-No Edward..perdoname tù a mi!!-dijo de nuevo llorando.
Las tripas se me retorcian de rabia.
-Uhm uhmm...sigo aqui..por si lo olvidaban!!-dije con sarcasmo.
El rostro de Bella se descompuso sonrojàndose de inmediato.
El vampiro hizo como si yo no existiera.
-Bella..te amo...siento que tengas un "novio" tan celoso!!-dijo con arrogancia.
Queeee!!! ¿Novio? ¿de que me perdì??
-¿Acaso dijiste "novio"???-preguntè lleno de incredulidad y con ira efervecente.
El rostro de Bella estaba aùn màs colorado.
-Este ..bueno..veras Jake..Edward y yo..la otra noche...-El nerviosismo de Bella la delataba.
-No necesitas decir màs Bella...entiendo perfectamente!!..solo quisiera hacerte una pregunta..¿por que rayos no me dijiste nada antes de besarme?-Soltè sin pensar en las consecuencias.
La cara del vampiro no tenìa precio.
La expresiòn de èl todo contrariado, molesto, descepcionado y sufrièndo al igual que yo me divertìa.
Las imagenes de lo que habìamos compartido hasta antes de que me desterrarà de la gloria, no las podìa olvidar.Al igual que el golpe bajo.
Un sonoro bufido por parte de èl, fue su ùnica respuesta.
Esperaba que le soltara un ùltimatum o algo por el estilo...Yo lo habrìa hecho!!
Que hiciera que Bella desidiera con quièn se quedaba de una buena vez.
Pero no.
La sanguijuela no le reprocho nada..ni siquiera levanto la voz.
Ya sabìa yo, que estas "cosas" no podìan tener sentimientos, eran frìos y duros como piedras
-Te equivocas en eso Jacob Black...tengo sentimientos..la amo màs que a mi vida..Por eso no me importa, lo que haya pasado-Dijo sin apartar la vista de Bella.
-Y de verdad lamento que aterrizaras de esa manera de "tu nube"!! Aunque agradece que fue ella y no yo!!-ESto lo decìa en murmullos.
¿Pero como pudo saber..? Lo dije en voz alta??

Bella aùn estaba recostada entre los brazos de èl.
El vampiro empezò a canturrearle una melodìa, con la cual ella al poco rato volviò a dormirse.
Aunque sentia que los pàrpados se me cerraban, no podìa permitirme el lujo de dejarla a la merced de la "garrapata".
-Deberìas dormir un poco...te notas cansado-Hablo con voz tranquila.
El se hayaba tan fresco como una lechuga..Era insoportable.
-Que..tù no estas cansado?-preguntè un tanto irritado.
La sonrisa burlona que aparecìa en su cara, me desquiciaba.
-No..nosotros nunca dormimos.
Bella seguìa profundamente dormida.
La cadencia de su respiraciòn era como si me arrullaràn.
Quisè aprovechar el tiempo para distraerme.
-¿puedo hacerte una pregunta?
-Claro creò que es lo mìnimo que te debo..pero tienes demasiadas en mente!!-Lo dijo afirmando
Eso me hizò recordar.
-¿còmo fue que tù..?no fue necesario terminar la pregunta ya que èl sabia a que me referìa.
-mmhh como te explicarè...algunos de mi especie tenemos dones..algunos tienen visiones del futuro,otros manejan las emociones..en mi caso..puedo leer la mente!!-dijo sin pizca de gracia.
Tuvo que pasar algunos minutos para que mi mente asimilara dicha informaciòn.
Genial!!! ahora ademàs de preocuparme por su apariencia, tiene la habilidad de saber lo que piensa Bella mucho antes de que lo diga!!
Los celos hacìan verme como todo un pobre infelìz.
-De nuevo te equivocas..no puedo leer la mente de Bella, aùn no sabemos la razòn.
Bueno por lo menos, una cosa menos de la que preocuparme.
-¿quieres preguntarme algo màs?
Me devatìa si hacerla o no.
-Acaso tù..¿digo no estas celoso?-Esa era mi prioridad.
-Jacob..he pasado en esta no-vida, cerca de 100 años, en completa soledad, hasta que la conocì, ella ha despertado al hombre que creìa haber perdido, asì que respondiendote..Si, estoy sumamente celoso, sòlo que yo no explotò ni los uso en mi beneficio para aprovecharme de Bella.-Aclaraba.
Bueno sì, lo reconozco, soy un manipulador!!
-Pero estaras de acuerdo que tengo que aprovechar cualquier ventaja que tenga a la mano..-Confesè.
La tregua entre el vampiro y yo, daba la sensaciòn de camaraderìa, por eso no pudè evitar preguntar.
-Y esta tregua hasta cuando vencera?
La sonrisa curvaba su pàlido rostro.
-Hasta que Bella despierte-Dijo con entusiasmo.
Asentì ligeramente, y ya un poco màs tranquilo, desidì dormir un poco.

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BELLA PVO
La luz que se colaba por entre la cortina, me despertò.
Me sentìa un poco extraña.
Como si estuviera un poco agarrotada.Tratè de estirarme cuando algo tocò mi mano.
Girè desperezandome de inmediato y me encontrè con el glorioso rostro de Edward demasiado cerca de mì, dandome los buenos dìas.
-Hola "Bella durmiente"..¿què tal dormiste?-Preguntaba con mi sonrisa preferida.
-Creò que puedo acostumbrarme a despertar asì para siempre-Conteste.
Los recuerdos de anoche, me llegaròn de pronto.
-¿Donde està Jake?-la preocupaciòn por que se hubieran peleado mientras dormìa apareciò.
-Tranquila..èl esta dormido-dijo señalando el pequeño sofa en la habitaciòn.
La incòmoda posiciòn en la que se encontraba, todo encogido por su descomunal tamaño, hizò meya en mi ya perturbada conciencia.
-Edward..yo quisiera, confesarte...Besè a Jacob..lo siento mucho..-Admitìa con vergûenza.
Si èl desidìa abandonarme o hasta gritarme, merecido lo tenìa.
-Bella..te entiendo, eres humana...sin embargo te suplicarìa que no lo vuelvas a hacer..-Dijo sonrièndo cariñosamente y dàndome un fugaz beso en los labios.
Sin duda Edward era el hombre perfecto...Nunca serè merecedora de èl.
-¿Por que no tomas un baño?.. en lo que despierto a Jacob-Un brillo malicioso apareciò en sus dorados ojos.
Aceptè sin objetar, necesitaba relajar mi cuerpo.
El agua caliente me ayudò bastante a terminar por despertar mi aletargado cuerpo.
Me vestì con la misma ropa y salì a ver a los chicos.
Edward y Jacob tenìan cara de niños cuando son sorprendidos hacièndo algo que no deberìan.
La curiosidad por saber que se traìan entre manos, la tuvè que dejar para despuès ya que antes de que pudiera hablar Jacob me ofrecìa bajar a desayunar.
Y como si fuera adivino, mi estomàgo empezò a gruñir por falta de alimento.
Edward tambièn lo apoyo gratamente emocionado.
-Wow!! Es grandioso que se lleven bien-dijè vièndo a ambos a los ojos.
Y de nuevo ahì estaban esas sonrisas de falsa camaraderìa entre ellos.
-Me pueden decir que se traen ustedes dos??-Preguntè ya frustrada.
-Nosotros??..nada Bella, solo que ahora nos entendemos mejor Jacob y yo!!-respondìa tratando de sonar inocente Edward.
-Ay Bella..tranquila, son "cosas de hombres"-Aseguraba divertido Jacob.
Soltè un resoplido en forma de derrota.
"HOMBRES...."
Terminamos de desayunar Jacob y yo; ya que Edward solo nos veìa comer.
Al haber traido cada quièn su auto supondrìa hacer las cosas màs fàciles ¿no?
Una vez màs me equivoquè...
Edward y Jacob empezaròn a discutir sobre quièn serìa el que estarìa custodiando detràs de mi camioneta. Se veìan tan infantiles.
-Parecen niños!!! No importa quièn vaya detràs de mi...no necesito a ninguno!!-Aclaraba enojada.
Por un instante ambos se me quedaròn vièndo sorprendidos, para segundos despuès ignorarme y seguir discutièndo.
Ya al borde de mi impaciencia, jugaròn "cara o cruz" dejàndolo a la suerte.
Edward ganò, provocàndo el rechinido de dientes de Jacob.
Por fortuna solo conducimos por tres horas.
Edward era menos paciente que Jake al tolerar la velocidad "tortuga" de mi antiguo vehìculo.
Al llegar por fin a casa de Charlie, èste saliò alegre a recibirnos.
Pero al percatarse de que no sòlo venìamos Jake y yo, me lanzò una mirada interrogante.
-Ammm...èl es Edward Cullen papà, èl es...
"DIOS...¿QUE LE DIGO A MI PAPA? ..SI MIRA PAPA EL ES MI NOVIO DE QUIEN TE HABLABA!!"
-OHHH eres uno de los chicos del doctor Cullen!!!...Bienvenido hijo,pasa ¿que te trae por aqui?-preguntaba mi padre.
Edward me hecho un vistazo ràpido antes de comentar.
-Lo que pasa es que me encontrè con Bella..ella es mi...profesora y tambièn amiga de mi hermana, venìa a invitarla a almorzar con mi familia.-Explicò con tono de lo màs educado y galante.
Charlie mirò involuntariamente a Jacob, por lo que me molesto.
-Claro Edward..aceptò encantada!!-dije dejàndo perplejo a mi padre y a Jacob.
-Solo damè unos minutos para cambiarme de ropa y bajo-Dàndome la vuelta abandonè la sala.
Echè un ràpido vistazo a mi guarda ropa.
No tenìa gran cosa...nunca he sido apasionada por las modas ni estilos.
Los nervios al ahora saber que me llevarìa a conocer a su familia me volvìan loca.
Conocìa ya a su increìble padre Carlisle, a Alice y de lejos a sus otros tres impresionantes hermanos.
Nunca habìa estado en esta encrucijada.
George...o Georgia!! jamàs habìa hablado de siquiera soñar con presentarme con sus padres..y doy gracias a Dios por ello.
Pero con Edward...por supuesto que lo anhelaba..pero a la vez me llenaba de pànico.
Y no era la idea de enfrentarme a todo un clan vampìrico, nooo.
Era el obtener su aprobaciòn, que me permitieran el acceso a la vida de su hijo.
Tuvè que respirar hondo varias veces para controlarme.
Sin perder màs tiempo tomè la ropa que creì que se me veìa bien y empecè a arreglarme.

Al bajar pudè percatarme de que sòlo se escuchaban dos voces.
-¿Dònde fue Jake?-pregunte a mi padre.
-Este..tuvò que ir a ver a Billy, dijo que despuès te hablaba.
Girè a ver a Edward.
Su hermoso rostro estaba aùn màs perfecto cuando sonreìa.
Sus dorados ojos me comìan con la mirada.
-Te ves hermosa!!-comento con voz suave.
Era increìble la sensaciòn que recorrìa mi cuerpo en este momento.
El carraspeo de garganta de mi padre me sacò de mi burbuja de placer.
Sabìa que tenìa la cara como semàforo.
-¿lista?..entonces con su permiso señor Swan, le darè sus saludos a mi padre-dijo Edward.
Nos fuimos en su reluciente volvo plateado.
Edward en el trayecto me tomò de la mano, al ver que por los nervios las estaba estrujando.
-Tranquila Bella...no te comeràn!!-sonreià divertido.
No pasò mucho tiempo cuando entramos a una escondida vereda, que llegaba hasta una hermosa mansiòn de color blanco.
La casa era gigantesca y bastante elegante.
No pudè evitar abrir la boca al contemplarla.
La dulce vocecilla como de campanillas nos recibìa alegre.
-Bella!!! -Corrìa y me abrazaba con ìmpetu Alice.
-Hola Alice..a mi tambièn me da gusto volver a verte-respondia sincera.
Al terminar de abrazar a la pequeña, me percate de que los demàs integrantes nos observaban.
-Esme..te presento a mi Bella-Edward me acercaba a una hermosa mujer con cabello del color caramelo y de rostro de àngel.
-Bella, ella es Esme..mi madre-Nos presentaba Edward.
Esme fue un poco menos entusiasta que Alice pero aùn asì me abrazo con ternura.
-Oh Bella, es muy bueno conocerte al fin, bienvenida cariño.
La dulzura de sus palabras me hacìan sentir còmoda.
-A mi padre ya lo conoces.
el doctor Cullen estaba al lado de su esposa.
Me avergonzaban los pensamientos que tuvè con èl, la vez que lo conocì.
-Hola doctor Cullen-Dije llena de vergûenza.
-Dime Carlisle, Bella-saludaba tomando mi mano.
-Y ellos son mis hermanos; Emmett, Jasper y Rosalie.-Los tres como habìa mencionado los habìa visto de lejos, pero ahora al tenerlos frente a mi, aparte de imponentes era imposible no sentirte menos que ordinaria junto a ellos.
La chica parecìa toda una "Barbie".
Rubia, alta y con un cuerpo de dimensiones perfectas por el cual cualquier mujer, yo incluìda pagarìamos lo que fuera.
El chico que respondìa bajo el nombre de Emmett era enorme, de verdad,parecìa levantador de pesas, sus facciones tenìan un suave aire infantil y alegre, su cabello era oscuro y rizado.
De repente me tomò de la cintura elevàndome del suelo con suma facilidad.
-Emmett no seas bruto bàjala!!-gritaròn Edward, Esme y Alice.
Con un sonrisa amistosa se discuplo el grandulòn.
-Ups..lo siento Bella, sòlo que me da mucho conocer a la que le quitara lo amargado a mi hermanito!!-Dijo guiñàndome un ojo y sonrièndo pìcaramente.
De nuevo el sonrojo ante sus palabras no tuvo piedad de mì.
Jasper no se acercò, desde lejos saludo con un movimiento de cabeza y una tìmida sonrisa.
El era bastante alto y fornido, no tanto como Emmett pero sì un poco màs que Edward, su cabello rubio lo diferenciaban de los demàs.
Eso si, nada que ver con el adorable tono cobrizo de Edward.
-Me da mucho gusto conocerlos a todos-Dije tràs haberme presentado a ellos.

Si la casa me habìa parecido hermosa por fuera, me quedaba corta al estar dentro.
Todo estaba decorado con un gusto impecable y elegante.
Desde los muebles hasta el jarròn con pàlidas y delicadas flores.
Edward me dio un "tour" por la casa, mièntras que los demàs insistìan en que ellos prepararìan la comida.
-Tu casa es hermosa!!-comentaba mièntras entrabamos a una de las habitaciones del tercer piso.
-Sì, Esme es la responsable..esta muy orgullosa de lograrlo...bueno y por ùltimo mi habitaciòn.-Susurraba a mi lado.
Era espaciosa, rodeada de grandes ventanales que daban la sensaciòn de estar enmedio del bosque.
Estaba repleta de libros de todo tipo, al igual que de mùsica de diferentes estilos y èpocas.
Todo estaba colocado en un perfecto òrden.
-En que piensas?-preguntò rozando sus labios a mi garganta.
El rocè de su piel contra la mìa despertaba chispas de energìa que bailaban por todo mi cuerpo.
No podìa pensar con claridad cuando lo tenìa tan cerca.
-Ummm..en lo bien que me siento junto a ti.-respondìa dàndome la vuelta para verle el rostro.
Fue mi perdiciòn!!
Sin pensar..solo actuando por instinto enrrosquè mis brazos en su cuello y lo besè.
-Te extrañe demasiado amor...-musito entre mis labios.
Su boca devoraba la mìa, mièntras que sus manos regalaban magistrales caricias por mi espalda.
Amaba a este perfecto ser...no me importaba que fuera vampiro, no me importaba nada.
Solo querìa tenerlo a èl.
Lo acerquè màs a mì, hacièndo que el contacto entre nuestros cuerpos fuera el mìnimo.
Un gemido de placer saliò de mi boca, a lo que Edward respondìa màs encendido.
-Edward...mamà dice que ya esta servido el almuerzo!!!... ohhh pero por mi no se detengan sigan !!!!-La interrupciòn de Emmett, me hizo enojar.
si no fuera tan grande y vampiro lo hecharìa a patadas!!
Edward y yo bajamos para reunirnos con los demàs en el comedor.
Todos nos veìan burlones...Emmett ya les habìa contado.
!!TIERRA TRAGAME!!!
A partir de ahì fui objeto constante de bromas y chistes de Emmett.
No negarè que es simpàtico y agradable..pero aveces el ser el centro de atenciòn de comentarios sexuales no es gracioso!!
Edward le habìa llamado la atenciòn, incluso le gruño amenazadoramente, pero el otro al parecer no se inmutaba.
Asì que Edward propuso ir a pasear.
Pensaba que iriamos en su auto, pero al parecer èl tenìa algo màs en mente.
-Ven te mostrarè como me gusta viajar-me invitaba sonrièndo lleno de entusiasmo.
Tenìa miedo, de que como habìa visto en algunas de esas tontas pelìculas de terror; donde los vampiros se convertìan en murcièlagos y volaban, que mi amado hiciera lo mismo.
-No me digas que tambièn vuelas??
La sonora carcajada que dejo escapar, me hizo sentir tonta.
Tomò mis brazos e hizò que lo abrazara por detras.
-Sùbete a mi espalda..pequeña cobarde-ordeno divertido.
Aùn no tenìa ni idea de lo que supondrìa su peticiòn, pero le hice caso.
En el momento de sentirme segura detràs de èl arrancò la carrera.
El aire por la velocidad azotaba en mi cara.
Ni siquiera podìa ver lo que tenìa al derredor, todo era una mancha borrosa por lo ràpido que hiba.
Cerrè mis ojos al sentir que nos estrallarìamos.
De pronto todo parò.
Estaba totalmente rìgida por el estress.
Edward estallaba de buen humor.
Al notar que no me podìa ni mover, me ayudo a bajar de èl.
-Bella pareces fantasma..¿te encuentras bien?-Su preocupaciòn por mi era sincera.
Todo me daba vueltas por el mareo.
Hizò que me sentara con la cabeza entre las piernas y respirara hondo.
Cuando me sentì mejor por primera vez me di cuenta de donde estabamos.
El lugar era un pequeño prado.
Realmente hermoso, lleno de flores silvetres que le daban un toque màgico y perfecto.
Daba la sensaciòn de que en cualquier momento saldrìan hadas y pequeños duendes para hacerlo parte de algùn cuento fantàstico.
-Te gusta?..Aqui es donde vengo a pensar..casi siempre en ti-Revelaba con ojos dulces.
-Si..es perfecto-dije acortando la distancia entre nosotros en un suave beso.
"AHORA SI, POR FIN SOLOS...!!!"