REVELACIONES

EDWARD PVO
El transcurso del dìa en esta escuela sin Bella, me recordaba lo mucho que ella habìa cambiado en mi miserable vida.
Pero cuando pensè que nada podrìa ser peor que esperar a que la tortura de alice con mi amada terminara, llegò ella.
Miles de veces preferìa padecer de nuevo la agonìa de ser convertido a tener que soportarla cuando se empeña en seducirme.
"Es una desgracia que no existan leyes de Acoso sexual que nos protejan a los vampiros!!!..Creò que mandarè una carta a Volterra exigièndola!!!"
-Por que tan solito "Eddie"???-canturreaba contonèando las caderas sugestivamente.
-Tanya..cuantas veces deberè decirte que odio que me llames asì!!..Mi nombre es Edward!!-Aclarè contenièndo las ganas de golpearla.
-Esta bien..E D W A R D!!..Pero aùn no respondes a mi pregunta..¿donde se metio tu ..."molesta y ordinaria" ..humana?-Se atrevìa a insultarla mentalmente.
-Mira Tanya..Bella no es ni molesta ni mucho menos ordinaria!! Asì que si no tienes buena manera de dirigirte a ella, te suplicarè que no te me acerques!!
Estaba dispuesto a retirarme de ahì, cuando la escuche que se disculpaba.
"Lo siento, es solo que verte asì..tan cambiado por ella, me llena de celos..Acaso no te gusto ni un poquito???"-preguntaba en silencio.
-No es eso..sabes que cualquiera sea humano o vampiro estarìa literalmente a tus pies..sin embargo Bella tiene èse poder sobre mi, no puedo evitarlo, la amo..y le pertenezco por completo!!-Comentaba siendo honesto con ella.
Pensaba que Tanya lo comprenderìa y me dejarìa por la paz...pero nuevamente me equivoquè.
"Pues eso lo veremos...aùn no me doy por vencida Edward!!"
Dicho esto saliò, buscando a Rosalie.
Por suerte, al dar por finalizada la jornada, sòlo nos regresamos los chicos a casa.
-¿dònde estàn Rosalie y Tanya?-preguntà al no verlas.
-Se fueron en el auto de Rose..segùn entendì tambièn ellas hiban de compras!!-aclarò Emmett.
En mi fuero interno maldecìa a Alice por esta estùpida broma de mal gusto.
-Ey!!..no podrè leer mentes, pero basta de mandar olas de agresiòn de seguro contra mi esposa!!-Me advertìa Jasper.
No me habìa acordado que hoy, nos tendrìamos que ir en el "prehistòrico" vehìculo de Bella.
Los tres al percatarnos de nuestro transporte, nos quedamos en shock!!
-No me haràs subir en eso!!!..."Ni siquiera cuando era humano me montè en un "armatoste" tan feo como èse!!"-Chillaba Emmett indignado.
-Gracias, pero creò que prefiero caminar...te apuesto a que llegò por primera vez antes que tù Edward!!-Soltaba divertido Jasper.
Emmett aceptò gustozo la apuesta con nuestro rubio hermano.
Sòlo me quedè.
Enfurruñado me subì a la camioneta.
Por màs que pisaba al fondo el acelerador no caminaba a màs de 80 km/h
Era desquiciante.
Sin embargo tenìa algo de bueno viajar en el auto de Bella.
Su escencia estaba impregnada en todo, desde la tapicerìa, hasta en el volante y el destartalado esterèo.
Para hacer un poco menos tedioso el trayecto, lo encendì.
La radio no servìa muy bien, pero pudè alcanzar a sintonizar una estacìon donde transmitìan, mùsica antigua.
Empecè a recordar la melodìa, y ya cuando me dì cuenta habìamos llegado a mi destino.
Mis hermanos estaban sentados en el porche de la entrada burlàndose.
Quisè ignorarlos, pero eran imposibles.
"Tortuga Edward..Tortuga Edward!!"-canturreaban al mismo tiempo
Sòlo me quedaba reìr con ellos a menos que quisiera que no pararàn en todo el dìa.


La espera era agonizante.
La noche ya oscurecìa el firmamento.
La ansiedad por no tenerla cerca y comprobar si estaba bien, me hacìa ver patètico.
Sòlo hasta que escuche la voz mental de Alice descansè.
Ya tenìa un buen rato que Rosalie y Tanya habìan llegado.
Y mi humor no estaba mejoràndo teniendo que soportar los nada discretos coqueteos de Tanya.
Me sentìa sofocar.
Por eso al sentir que ya estaba cerca Bella corrì a su encuentro.
Ni siquiera le di la oportunidad de abrir la puerta del carro.
La saquè con delicadeza del vehìculo y recibièndola entre mis brazos.
-Te extrañe tanto amor!!-Dije sincero.
su corazòn parecìa un colibrì, y me encantaba.
La alejè solo lo suficiente como para atrapar sus labios con los mìos.
"Ay Edward eres un exagerado!!! tan solo nos tardamos unas cuantas horas!! y eso no serà nada..espera a que vayamos a Portland o a los Angeles!!--Decìa mi pequeña hermana.
Hiba a protestar contra mi hermana, cuando me di cuenta que Bella hacia un dulce mohìn con su boca por lo corto de mi beso.
Se veìa adorable.
Que tanto Alice como yo no pudimos evitar soltar la risa.
A todo el resto de la familia les extraño escucharme reìr despuès que toda la tarde, habìa tenido un humor de "perros"...Y de nuevo yo, mencionando a Jacob Black!!
-Que es tan gracioso?.-preguntaba Emmett confundido.
Jasper corriò a recibir a Alice, tambièn èl la habìa extrañado en todo el dìa.
Bella, al percatarse de que Jasper besaba a su esposa, desviò su mirada avergonzada, miràndome de reojo, con algo que pudè alcanzar a distinguir..tristeza.
Què le habrà recordado esa muestra de afecto?
Acaso estarìa pensando en el "pulgoso"..o en alguièn màs??-La duda me carcomìa en mi interior.
Mi egoìsmo me hacìa olvidar a veces que Bella era ya una mujer, tenìa un pasado antes de mì.
Quizà alguièn màs habìa sido el maldito afortunado en poseer su cuerpo por primera vez.
Me dolìa pensar eso,me llenaba de rabia.
Estaba tan metido en mis pensamientos que no habìa advertido que Bella respiraba màs aceleradamente.
No se debìa a mi contacto, por lo que mirè que era lo que la perturbaba.
Tanya, nos observaba con una clara mueca de disgusto en el rostro.
Esme tambièn advirtiò la tensiòn que habia en el ambiente, por lo que para romper el hielo, nos invitaba a entrar.
"Edward..he visto que hoy no creò que te puedas safar!!..Tienes que aclarar todas tus dudas con Bella esta noche!!"-me confirmaba Alice.
Los nervios ahora ocupaban mi mente.
"Sere lo sufiecientemente hombre como para ser lo que Bella necesita??!"
"No la matarè en el intento??!""
Mièntras que yo me debatìa en mi interior, todos los presentes tomamos asiento en la sala.
Bella a mi lado.
Alice empezò con tono ceremonioso su discurso.
-Bueno, estamos todos aqui reunidos..como ya han de saber, para empezar con este concurso, las dos candidatas desde este momento cambiaràn sus apariencias...Necesitaremos jueces en este certamèn..¿algùn voluntario?-dijo miràndo amenazadoramente a Jasper y Emmett.
A Emmett no hacìa falta preguntarle, tan solo la palabra "concurso" lo llenaba de exagerada emociòn.
-YO...Yo..Escogème Alice!.."Yo soy el màs apto!! nunca me he perdido un solo concurso de belleza, desde 1957..uyyy que no se enterè mi Rose!!-Pedìa Emmett.
Jasper solo se lìmito a darse por vencido.
Ponerse en discusiòn con Alice a nadie le convenìa.
Alice empezò a dar los pormenores y clausulas de la prueba.
dijo que Emmett serìa el que estarìa vigilando a Bella y Jasper a Tanya, para que se aseguraran que ninguna hiciera trampa..Como si pudiera suceder tenièndo a Alice miràndo!!
Tanya empezo a quejarse de que el estilo en la forma de vestir de Bella era anticuada.
Por lo que Bella soltò de sopetòn el aire que tenìa guardado.
Sin duda estaba molesta.
Para mi, no le veìa absolutamente nada de malo en la forma que Bella se arreglaba, era perfecta con lo que usara!!
Alice empezò a contar para dar iniciò a esta "payasada"
-Bien a la cuenta de tres..1..2..3!!
"Tranquilo hermanito..no le harè nada..solo te la devolverè màs hermosa!!"
Bella a pesar de estar nerviosa, se le veia sumamente cansada.
Desidi que era ya tiempo de llevarla a descansar.
Alice nos acompañarìa, para avisarle a Bella que el martirio de su transformaciòn empezarìa mañana.
Yo conduje junto a ella en el viejo "trasto".
-Te notas nerviosa..sabes que en el momento que desees puedo parar todo esto-Dije tratando de calmarla.
-No Edward..he aceptado y no me vencerè tan fàcil-respondiò tercamente.
Habìamos llegado a su casa.
Alice le confirmo que mañana estarìa aqui.
Le pedì que se llevara el auto de vuelta, ya que yo tenìa planeado quedarme esta noche con Bella.
-Alice acepto sin poner objeciòn, guiñandome el ojo.
Al apenas desaparecer por la carretera.
Bella me pidiò que la esperara en su habitaciòn.
Tomè las bolsas llenas de las compras del dìa, parecièndome graciosa la imagèn de mi.
Siempre me divertìa a costa de mis hermanos, dicièndoles lo rìdiculos que se veìan cargando las bolsas de sus mujeres y hacièndo lo que ellas deseaban sin chistar...y ahora yo hago lo mismo.
Entre sin dificultad por la ventana.
Coloquè las bolsas sobre la cama.
La curiosidad sobre lo que Alice habrià escogido para jugar a Barbie Bella, pudo màs que mi cordura.
Bella estaba en la recamara de Charllie, por lo que no suponìa me pescarà revisando sus cosas.
Tomè la primera bolsa, y saquè algo de su contenido.
La sorpresa fue mayùscula al ver que entre mis dedos estaban unas minùsculas panties de encaje, sumamente reveladoras.
traguè en seco.
Era demasiado tentador para mi poco autocontrol que Bella las usara.
Estaba aùn en estado de shock, cuando Bella estaba miràndome.
No podìa hacer como que aqui no pasò nada, cuando habìa sido sorprendido "in fragantti" con las manos en la evidencia.
Que le hiba yo a decir??
Ah si Bella estaba revisando lo que compraste, haber si algo era de mi talla..¿no verdad?
Asì que tuve que tomar valor y algo de humor para aminorar mis nervios.
-Vas a modelar para mi??-Pedì tratàndo de sonar como un depravado.
Lo que no tenìa en cuenta fuera su respuesta.
-Y que tal si me ayudas tù a ponermelo?-Pedìa en una voz dulce y llena de sensualidad, que me hacìan volver loco.
Se acercò a paso felino.
Desconocìa esta nueva faceta de Bella.
Tomò la prenda de mis manos y con delicadeza con su mano libre acariciò mi mejilla.
Se pusò en puntillas y me rozò con la punta de la lengua el contorno de mis labios.
Tuvè que controlar el impulso que tenìa de tirarla sobre la cama y hacerla mìa en ese instante.
Bella al parecer veìa mi debate interior y le divertìa.
soltò una leve risita, bajando la mano que estaba sobre mi mejilla, recorrièndo mi cuello, el pecho, mi abdòmen..hasta llegar al botòn de mis pantalones.
Era màs de lo que podìa soportar.
La tomè de la cintura estrechàndola màs a mì.
Devoràndo en un beso de pasiòn sus tiernos labios.
Nuestras lenguas danzàndo y regalando caricias una a la otra.
Me separè de su boca permitièndole tomar aire, recorrièndo ahora yo con mi lengua su garganta.
El sonido de sus gemidos llenos de placer, combinados con el dulce nectar de su sangre, me hacìan perder la razòn.
Volvì a su boca como si fuera una necesidad apremiante.
Ella era mi perdiciòn..Definitivamente era adicto a Bella.
A su sangre, a su cuerpo y principalmente a su corazòn.
Bella acariciaba con gran maestrìa, mi ahora tan evidente excitaciòn.
Un gruñido de mi parte, saliò entre mis dientes.
Sabìa que no habìa marcha atràs.
La hiba a hacer mìa.
Fue cuando recordè lo que me torturaba hace unos momentos.
En mis tiempos era muy importante llegar virgen al matrimonio.
No era necesariamente una condiciòn, pero al nunca encontrarme a alguièn que me llenara de esta forma como Bella, lo habìa puesto màs que nada como un justificante ante mi familia.
Estaba a punto de echar por la borda tantos años de estarme querièndo convencer a mì mismo.
-Bella..te amo-musitè en sus labios.
-Eedwward..hazme el amor-dijo entre jadeos.
Su peticiòn para mi era una òrden..sin embargo no era lo que yo hubiera querido escuchar.
-Bella quisiera antes preguntarte algo..-dije tranquilo, alejando su cuerpo, ganandome una mirada de reproche.
-Alguna vez tù..-La vergûenza hizo imposible que siguiera.
Bella se quedò por unos segundos en silencio.
-No, tù serìas mi primera vez-respondio casi en susurros.
LA enorme alegrìa que me inundaba que nos hallaramos en igual de condiciones, era demasiado grata.
-¿Estas segura de querer hacerlo...Me amas Bella?-pregunte lleno de miedo.
-Si..si, te amo Edward!!
-Sòlo eso necesitaba saber-Dije volvièndo a unir nuestras bocas en un intenso frenesì.
Bella se sentìa de la misma manera que yo.
Sus delicados dedos desataban los botones que estorbaban en mi camisa dejàndo mi torso desnudo ante sus ojos.
Sus iris chocolates se habìan oscurecido por el deseo.
Me relamì los labios por lo suculentos sonrojos que en sus mejillas subìan.
Yo no creìa justo que ella solo se divirtiera.
Asì que yo tambièn empecè a quitar su blusa.
Deseaba darle a Bella la mejor noche en su vida, antes de proponerle una eternidad junto a mi.