domingo, 16 de agosto de 2009

CAPITULO 1--ENFRENTANDOME A LA VERDAD--

El camino se me hizo eterno, estoy en la puerta del hospital de Forks en plena noche, y como debe ser costumbre en este lugar...¡empapada!
Sacudo un poco mis ropas mojadas y me dirijo hasta el mostrador de informes.
Una mujer de alrededor de unos treinta y tantos años, parece ser la jefa de enfermeras, de rostro redondo y de mal permanente en su cabello.
-Buenas noches, ¿me podría dar informes sobre el estado de salud de Charlie Swan?
-Claro, siempre y cuando me diga el parentezco que tiene con el paciente, querida.-decía cortante.
Ay, tengo escasos 2 minutos en este endiablado lugar y ya tengo ganas de dejarlo, ¡tranquila Bella! Recuerda que estas aquí por Charlie, deja de ser egoísta!!-me regañaba a mí misma.
-Soy su hija-contesté tratando de sonar amable.
-¡Oh! ¿tú eres Isabella?-Las pupilas de la mujer se agrandarón por la sorpresa recorriendome con la mirada de arriba a abajo.
Genial,por fin ha llegado la ingrata hija del pobre jefe Swan-pensaba.
En ese momento, la enfermera tomó el microfono del altavoz.
-"Doctor Cullen, doctor Carlisle Cullen...se le solicita su presencia en el mostrador de informes...doctor Cullen"-decía con voz empalagoza.
-Un momento querida el doctor no tardará en venir-estaba de lo más entusismada.
De un momento a otro, varias enfermeras salierón de no sé donde y estaban cerca del mostrador emocionadas como si de algún evento sorprendente pasará.El estado de espectación era tal que algunas sacarón de sus uniformes espejitos para mirarse y arreglarse un poco.
-El doctor Cullen es nuevo en Forks, muy talentoso, toda una eminencia,a pesar de su corta edad, pero sobre todo es guapísimo.-Me aclaraba la mujer al ver mi confusión.
De repente se pusó nerviosa, y se empezó a reir tontamente. Voltée para saber la razón.
Un hombre alto, pálido al extremo, y sumamente atractivo estaba junto a mí. Más parecía una estrella de cine que un simple doctor.
-Hola Rubí, ¿para que me solicitaste?-Decía amablemente.-Oh por Dios!!, su voz era encantadora. ¿Será casado?, mi mente empezaba a divagar, al ver que me quedaba viendo con la boca abierta como las demás. ¡Contrólate Isabella!!
-Sí, doctor...Uhmm, la señorita Swan, pregunta por su padre.-Rubí se contorneaba queriendo parecer sensual y coqueta, cayendo en lo rídiculo.
Una mueca de disgusto aparecio por un segundo en el rostro del doctor.
-Señorita Swan, soy el doctor Cullen encargado del caso de su padre.-decía estirando la mano en señal de saludo.
La gelidez de su piel, me saco del letargo y la vergüenza de que me haya atrapado babeando por él, me hizo ponerme roja como un tomate.
-si me acompaña, le diré los pormenores del caso.-Respondía mientras nos alejabamos de todas las enamoradas enfermeras.
caminamos por los lúgubres pasillos, si había algo que odiara más que a Forks,era el olor de los hospitales.
-Bueno señorita Swan, el caso de Charlie, es algo bastante extraño por no decir milagroso,en estos días la recuperación ha sido magnífica, aunque hemos querido que pasará la etapa crítica, para saber la gravedad del caso. La operación es riesgosa como cualquier otra intervención quirúrgica, pero tengo fé en que saldrá exitosa.
¿queee? ¿a qué se refería con "estos días"?¿operación? ¿de que rayos hablaba?
-¿cómo que dias, hace cuanto que paso el accidente? Y mejor empecemos ¡que fué lo que paso?-Mi ansiedad estaba llegando a mis límites.
-Tranquila, al parecer no tiene idea de lo que hace aquí ¿verdad?- comentaba cortés-Empezaré por contarle que su padre se accidento estando cumpliendo con su deber.Acababan de asaltar el banco de Forks, el jefe de policía los perseguía,pero con la velocidad y el pavimento mojado, terminarón ambos coches derrapándose por el acantilado que da hacia la playa de la reservación de La Push. su padre fue el único sobreviviente. Han pasado tres días, y aunque en el exterior sus heridas no son graves; cortes y magullones, acabamos de diagnósticar que su padre está paralizado de la cintura para abajo.
La noticia me cayó como balde de agua helada. Mis ojos se llenarón de lágrimas y las piernas me temblaban. Charlie quedaría paralítico.¡Oh por dios No!!!
Sabia que dde un momento a otro estaría sollozando en el frío suelo, pero eso no ocurrió, sus brazos me sujetaban, impidiendome caer.
El dolor me traspasaba, inconsiente de mis actos me abracé a él para sentir consuelo. De repente alguién carraspeó fuerte para llamar nuestra atención.
De inmediato el doctor se alejo de mi, al voltear a mirar su cara, ví que hacía un gesto como si algo apestara.
-Bella ¿eres tú?- Un hombre moreno de rostro arrugado y sentado en una silla de ruedas me llamaba.
Junto a él, había un jóven muy alto, fornido, al parecer era su hijo por el enorme parecido, aunque él era muy atractivo. Ambos veían al doctor con "cara de pocos amigos".
Yo no tenía ni idea de quienes eran o por que sabian mi nombre.
-Son amigos de su padre, ellos fuerón los que lo trajerón al hospital ése día.-Me aclaró el doctor al ver la interrogante en mi cara.

4 comentarios:

  1. ahh!!! Me encanta lo ke haces!! ahh!!! mi amado JAKE!!! APARECIO!!! ahahahahaha espero ke no me lo hagas sufrir mucho eh?? ahahahahaha te amo preciosa!!!!

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  2. gracias, Kokorito!!! Para nada,Jacob aqui también tendrá parte importante en la historia!!! prometo tratarlo bien!!! jajaja.
    Besos!!!

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  3. hola carla soy fanatica ALEXA Y KOKORO y me encanto tu historia eres buenisima bueno hoy tienes una nueva seguidora gracias y por fa sigue escribiendo y nosotros seguiremos leyendo besos y suerte

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  4. mucho mejor ahora ya tiene un poco de sentido

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