FIESTA DE COMPROMISO 1

BELLA PVO
Apenas se habìa marchado Edward y ya lo extrañaba.
En la soledad de la cabaña, fue cuando consientemente tomè la seriedad de lo que habìa hecho hace unos momentos.
"Me voy a casar??..Y me convertirè en vampiro al mismo tiempo!!!"
No tenìa mucha idea, de lo que me esperaba, jamàs le habìa preguntado a Edward como se llevaba a cabo una transformaciòn, ni lo que implicaba.
Pero lo que màs me aterraba...era como explicarle a mi padre y madre..y a todos los demàs de mi inesperado compromiso.
Tuvè que sentarme en el borde de la cama, para no caerme por el semejante peso que sentì de pronto.
Ansiaba estar con Edward, lo amaba de verdad, pudè enfrentarme por èl a una loca y desesperada vampiresa...pero no podìa encontrar el valor para encarar a unos padres y una sociedad prejuiciosa.

"No hay marcha atràs!!!"-Sus palabras retumbaban en mi mente.
El matrimonio de mis padres, me habìa dejado marcada. No creìa en la seriedad que conyevaba unirse eternamente dos personas tan distintas para compartir un futuro juntas.
Reneè habìa dejado destrozado a mi padre al haberse marchado..Y hasta despuès de tantos años Charlie ha podido superarlo con Sue.
¿pero y si Edward se cansarà de mì...yo podrìa sobrevivir a pasar una eternidad sin èl??
Inconsientemnente me llevè las manos a la cara, para reprimir las làgrimas.
El gèlido roce en mi cabeza me hizò levantar la mirada.

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EDWARD PVO
Lleguè a la cabaña en un tiempo record.
En el bolsillo de mi pantalòn llevaba el pequeño cofrecito que resguardaba lo màs preciado para mì, hasta antes de conocer a Bella.
Abrì sigilosamente la puerta de entrada, y me extraño solo escuchar una pequeña respiraciòn entrecortada.
Avancè hasta llegar a la alcoba, para encontrarme con la imagen de Bella sollozando entre sus manos, sentada en la cama.
Por un momento me quedè petrificado asumièndo que ella estaba asì por que se habìa arrepentido de su desiciòn de quedarse conmigo.
El corazòn muerto que llevo en el pecho sòlo con ella parecìa volver a latir.
tuvè que reunir el valor necesario para llegar hasta ella.
Acariciè su cabeza, sintièndo su calidez traspasar mis dedos.
Ella de inmediato levanto su mirada para obervarme.
El sufrimiento en sus ojos me dolìa.
-Bella si te has arrepentido..yo, lo entenderè....-quisè sonar desidido, pero la voz se escuchaba romperse, al mismo tiempo que mi corazòn.
Bella se pusò de pie rodeàndome con sus brazos la cintura.
-Te amo..sòlo que tengo miedo!!.Decìa ocultandose entre mi pecho.
No sabìa bien a lo que se estaba refirièndo, asì que la hice sentar de nuevo en la cama, mientras que yo tomaba lugar junto a ella, para hablar.
-Dime que es a lo que le temes Bella..confìa en mì, por favor!!
Tràs un minuto de indesiciòn, hablò.
Sus dudas tratè de calmarlas, principalmente eran acerca de la transformaciòn y lo que se esperaba de ella por un tiempo.
Pero aunque no podìa leer la mente de mi pequeña, sabìa que me ocultaba algo màs serio.
-Es sòlo eso lo que te preocupaba Bella?? ..o hay algo màs??
su rostro la ponìa en evidencia.
su cara estaba tan sonrojada que no podìa pasar desapercibida.
si era por que aùn no se sentìa preparada para ser vampiro..yo con gusto podrìa esperar..el tiempo no era problema para mì.
-Mira Bella..si necesitas tiempo, yo puedo esperar a que estes completamente lista..no hay prisa!!
-No, no es eso!!..Lo que quiero decir..Edward tù me querras igual?? aùn despuès de que ya no sea humana??
"¡A eso le temìa??? ..a que ya no me gustara???!!!"
-Bella, no tienes ni idea de lo mucho que me gustas...Y cuando seas vampiro, solo harà que me sienta màs atraìdo a tì..eso y que seas mucho màs duradera!!!-dije ya sin contener la risa.
Bella soltò un suspiro de alivio y se uniò a mì en la alegrìa de un abrazo.
Tomè su rostro entre mis manos para alcanzar sus labios.
Bella encaminò sus delicados brazos hasta llegar a mi cabello sujetàndolos para acercarme màs a ella.
Su lengua y la mìa recorrìan cada espacio de nuestras bocas, saboreàndonos mutuamente.
el dolor en la garganta ya lo habìa aprendido a ignorar cada vez que estaba cerca de Bella.
Pero mi instinto era otra cosa.
Y al saber que pronto, tendrìa su dulce sangre recorrièndo mi sistema para poder inyectarle mi ponzoña me hacìan querer perder el control.
Me desprendì nuevamente de ella..esta vez por su bien.
Y recorde que aùn tenìa el pequeño objeto en mi poder.
Tomè su delgada mano, y miràndola directamente a los ojos, me pusè de rodillas antre ella.
Bella de inmediato se llevò la mano que tenìa libre a la boca para impedir un grito.
-Isabella Marie Swan...me concederìas ser oficialmente mi esposa??-Pedì sacando la cajita y entregandosela en la mano.
Los chocolates de sus ojos se derretìan en dulzura y lagrimas.
Tomò con gran cuidado el cofrecito que llevaba el pequeño anillo de mi madre.
Confiaba que a ella le gustarìa y que ademàs le quedara a la medida.
Recordè un dìa que mi madre, me decìa..
-"El dìa que le entregues este anillo, a la que elijas por esposa, no tendràs duda alguna de que le calzarà a la perfecciòn!!"
Dicho esto mi sorpresa fue grata al ver cuanta razòn tenìa mi madre.
La sortija se veìa magnìfica en el dedo de mi amada.
Si, ese era su lugar.
La abracè de inmediato dàndole vueltas por el cuarto, lleno de felicidad.
Su risa cantarina hacìa saltar mi corazòn.
unos pequeños golpecitos en la puerta, nos sacaròn de nuestra burbuja de felicidad.
-¿Quièn puede ser?-preguntò confundida Bella.
Sòlo una personita serìa capaz de semejante intromiciòn!!!
Alice Cullen!!!